En relación con la alarmante situación ambiental de la relavera Quiulacocha ubicada en la región Pasco, la empresa estatal Activos Mineros (AMSAC), dedicada a la remediación de pasivos ambientales mineros en el Perú, cumple con informar a la opinión pública, lo siguiente:
El Estado peruano encargó a Activos Mineros el cierre ambiental de la relavera de Quiulacocha y las labores de control de los niveles de su agua ácida, debido al alto riesgo que representa la posibilidad de un rebalse en época de lluvia, el mismo que afectaría seriamente la salud de la población y la recuperación del medio ambiente en la región Pasco.
Lamentablemente, la comunidad campesina de Quiulacocha viene impidiendo a la empresa ejecutar las obras de nivelación del borde de la relavera que tienen como fin evitar un posible desborde, que podría superar los 600 mil m3, y que tendría catastróficos efectos para más de 2 mil personas de las comunidades de Yurajhuanca, Rancas, y las adyacentes a Pasco.
Activos Mineros denuncia que esta oposición social no es gratuita, sino que responde a un convenio con beneficios económicos celebrado entre la comunidad campesina de Quiulacocha y la empresa Cerro de Pasco Resources, la cual pretende realizar actividades de exploración y reaprovechamiento de los relaves existentes en la concesión de El Metalurgista que está superpuesta a la relavera Quiulacocha.
Al persistir esta negativa, pese a los diversos espacios de diálogo multisectoriales sostenidos con diversas autoridades y la comunidad, Activos Mineros se ha visto obligada a resolver los contratos asumidos para la nivelación del dique y a suspender los estudios de plan de cierre que venía realizando en la relavera.
En ese sentido, Activos Mineros hace enteramente responsable a la directiva de la comunidad campesina de Quiulacocha y a la empresa Cerro de Pasco Resources por el posible desastre ambiental que ocurriera en la zona. Asimismo, ha procedido a interponer las denuncias correspondientes ante la Policía Nacional y el Ministerio Público.
A pesar de estos obstáculos, la empresa continuará desarrollando esfuerzos técnicos operativos, para tratar de evitar un rebalse, mediante el bombeo permanente y continuo de las aguas ácidas para su neutralización y tratamiento (aproximadamente 7,100 m3/día), así como actividades de contingencia en beneficio de la población.