La sub gerencia de comercialización a través del área sanitaria realizó una inspección inopinada a un establecimiento comercial que se dedica al expendio de aguardiente.
De las declaraciones vertidas del médico Jesús Palacín dentro de los bidones de alcohol (caña) de dudosa procedencia se observó flotando moscas y pequeñas larvas de gusanos, “el comercio está ubicado cerca al paradero de las combis que van para el Jr. Moquegua (Circunvalación Arenales) , al recabar información que parroquianos compran estos productos, se ha visto por conveniente realizar esta requisa, “se estará analizando de donde provienen el aguardiente, la propietaria no quiso identificarse, además no contaba con licencia de funcionamiento probablemente atendía clandestinamente” expresó el funcionario.
Alertó a tener cuidado con la compra a granel de este licor que pone en peligro su salud, en breve se tendrá los resultados del análisis, puntualizó.