
O.B. Luego de la fiebre mundialista que paralizó y encandiló a todo el país, se hace imprescindible aprovechar el aventón anímico, para sentar las bases de un desarrollo sostenido del futbol local, a partir de la integración y participación masiva de los jóvenes con talento en todos los estamentos de la pirámide del futbol. Desde Ligas distritales, a la Copa Perú, hasta la Segunda y Primera División profesional.
Así entonces, la FPF en virtud de lo anterior, “tomó el toro por las astas” por primera vez en la historia, y está implementando con un altísimo nivel de profesionalismo (X) un proyecto de desarrollo del futbol juvenil a nivel de provincias, con el objetivo de incrementar el nivel y luego convertir a cada rincón del país en un potencial proveedor de jugadores de calidad. De esta manera, se podrá alimentar a las selecciones peruanas de las categorías menores, como el proyecto de Daniel Ahmed y la Sub 20 según relata Betsson y, en el futuro, poder tener un espectro mucho más grande de jugadores, con potencial de ser convocados a la Selección absoluta formando parte de este gran fenómeno socio-cultural e integrador que significa vestir la Blanquirroja.
Sobre el particular, fuentes de la FPF nos han referido que han detectado distintos niveles de potencial en provincias, siendo las más fuertes las zonas de la selva y de la costa norte del país, en las que se han encontrado jugadores con gran habilidad y técnica. Se podría decir que en los próximos años podríamos tener en el futbol profesional más jugadores como el tarapotino Miguel Trauco, que rápidamente llego a un grande del futbol mundial, como es el Flamengo de Brasil.
Razones vinculadas a la densidad demográfica, a la identidad cultural y al mestizaje, podrían explicar la mayor concentración de buenos futbolistas en determinadas zonas del país.
La idea que prevalece en la FPF, es que la búsqueda del talento se expanda lo máximo posible a nivel nacional y, no como en el pasado, que se restrinja a los proveedores regulares de jugadores, que fueron las zonas de Lima y Callao.
Hoy en día de hecho, en las Selecciones Sub 15, y Sub 17 hay jugadores de provincia, como nunca en la historia y, no por la obligación de mandar un mensaje políticamente correcto, sino por la realidad fáctica de la calidad futbolística encontrada.