“Con este tipo de viviendas se busca proteger a las familias afectadas por heladas y friaje, y principalmente a la población más vulnerable: niños y niñas y personas adultas mayores. Para el acondicionamiento de las casitas calientes se está usando la tecnología de muro ‘trombe’, la cual permite conservar el calor del día gracias a planchas de policarbonato. Con eso las familias se calientan en las noches”, señaló Bustamante.
Las viviendas térmicas también cuentan con pisos machimbrados. “Antes tenían pisos de tierra. Definitivamente las condiciones de vida de las familias están mejorando y ahora los niños y las niñas estudian más cómodos en casa. El riesgo de que se enfermen por el frío ha disminuido bastante”, agregó la titular del Midis.