LA REPUBLICA. La corrupción es considerada como el principal problema de nuestro país para más de dos tercios de la población, según revela la última encuesta nacional urbano-rural del Instituto de Estudios Peruanos (IEP), realizada para La República.
El estudio, que consultó a la población del 13 al 17 de julio últimos, permite que tengamos aproximaciones sobre el alcance de diversas opiniones en nuestro país, con márgenes de error de 2.8 puntos (por encima y debajo) en cada resultado.
Al referirse sobre los problemas principales del país, más de dos tercios de los encuestados mencionaron a la corrupción (68%). Le siguieron en menciones la delincuencia (38%), la falta de trabajo (32%) y la situación económica en el Perú (30%).
La delincuencia es considerada como uno de los problemas principales del Perú en mayor medida en Lima (55%) que en el interior del país (29%).
La percepción de la corrupción como uno de los mayores problemas del Perú ha aumentado en los últimos años: en abril del 2016, preponderaba la delincuencia (66%) sobre la corrupción (41%); en febrero del 2017 también (61% versus 52%).
De este manera, en cierta medida, la agenda del presidente Martín Vizcarra, que preconiza un discurso de lucha contra la corrupción, ha ganado terreno a la agenda del fujimorismo, que suele aprovechar la preocupación sobre la inseguridad.
Vizcarra afectado
Sin embargo, una mayor dimensión de la corrupción en las inquietudes de la población parecen también desbordar la confianza en el Gobierno para resolverla. Más aún, cerca de una quinta parte del país (43%) considera que el Ejecutivo no sabe cómo resolver los problemas del país. Un grupo algo mayor (46%) cree que es cuestión de tiempo para las soluciones.
Más de dos tercios de los peruanos (68% en esta encuesta del IEP) también considera que la corrupción de los gobernantes es el principal obstáculo que ha tenido el Perú para desarrollarse a lo largo de su historia.
En tanto, la aprobación al desempeño de Vizcarra disminuye de casi la mitad de la población, hace un mes, a solo dos quintas partes del país (de 47% a 40% en el sondeo).
Las mayores caídas se dan en la sierra y en el centro y sur peruanos. Llama la atención esto cuando aumentaron las protestas y críticas por la licencia de construcción que dio el Gobierno para el proyecto minero Tía María, en Arequipa.
Asimismo, la mitad de la población considera a Vizcarra un demócrata y solo una quinta parte (22% en la encuesta) lo ve autoritario. No obstante, esta percepción es mayor en el interior y entre los más pobres (niveles socioeconómicos D y E).
A esto se suma que un 60% no cree que Vizcarra tenga claro un plan para el desarrollo del país. Además, la mitad (49%) dice que el jefe del Estado usa las reformas políticas para ocultar problemas serios de gestión. Frente a este grupo, existe un 41% que sí piensa que Vizcarra está realmente comprometido con la lucha contra la corrupción.