AGENCIAS El televisor estaba encendido a alto volumen, detrás de la puerta nadie contestaba al llamado del hotelero. Cuando Rafael Capani Huamán, abrió la habitación N° 302 del hostal «Caprichos» ubiucado en el distrito de El Tambo en Huancayo, encontró a la huésped y sus dos hijos inertes sobre la cama por lo que llamó a la Policía.
Los custodios del distrito de El Tambo llegaron y hallaron una torta en el piso, gaseosa, yogurt, sobres de veneno y pastillas diazepán. En el cuaderno de registro, la madre se identificó como Gaby Quispe Alania (30). Este nombre movilizó a los agentes de la Seincri, pues Gaby era la mujer que policías de Cerro de Pasco buscaban. Gaby Quispe, estaba implicada en el asesinato de su suegra Obdulia Huaricapcha Meza (89) a quien habría victimado a golpes en la granja Familia Luz de la localidad de Chasquitambo distrito de Ninacaca.
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PENOSO. La mañana del último, Gaby Paquita Quispe Alania (30), tuvo una discusión con su esposo Lucio Córdova Huaricapcha. Molesta habría asesinado a su suegra Obdulia, golpeándola con un objeto contundente. Luego del crimen, la joven madre escapó a la ciudad de Huancayo, sus vecinos la vieron abordar un bus junto a sus hijos Chellsy C.Q. (8) y Eker C.Q. (3). A las 16:00 horas del martes, Gaby Quispe se alojó en el hostal ‘Caprichos’ ubicado en el pasaje Tarma Mz 36 lote 23 en la Ciudad Universitaria. Al mediodía del miércoles la vieron por última vez. Mientras sus hijos jugaban en el pasadizo del aposento, ella regresó con una torta, gaseosa y yogurt. La torta era para celebrar por anticipado el cumpleaños del pequeño Iker Yeoshua quien este 19 de abril iba a cumplir 4 años.
En medio del festejo, Gaby dio diazepán a sus hijos, luego puso veneno en sus bebidas. Se metió a la cama y con sus hijos dormidos, los abrazó y esperó morir. En medio del asombro de los vecinos, los cadáveres fueron trasladados a la morgue de Hualhuas.