Con profundo dolor e indignación, las comunidades indígenas de la etnia Kakataibo y de la Amazonía peruana despidieron hoy al líder asesinado Mariano Isacama, quien fue hallado muerto el pasado domingo con un proyectil de arma de fuego multitudinaria. Durante el sepelio, la multitud clamó justicia y la presencia del Estado para proteger sus tierras y vidas.l
El sepelio de Isacama se llevó a cabo hoy, luego de haber sido velado durante la noche anterior y hasta casi las 11 de la mañana. El cuerpo del líder indígena fue flanqueado por la guardia indígena, quienes portaban lanzas, flechas y fres, mostrando su rechazo a la violencia y las amenazas que enfrentan los líderes indígenas en la Amazonía.
El cuerpo de Isacama se encontraba dentro de una camioneta, acompañado por sus padres y otros familiares. Durante el recorrido hacia el cementerio municipal de Aguaitía, la multitud, compuesta por amigos, allegados y líderes de otras comunidades indígenas, acompañó el cuerpo de Isacama con profundo dolor y clamores de justicia.
Muchos de los pobladores se despedían de Mariano Isacama en su idioma nativo, el cacataibo, durante el sepelio. Su padre, con la voz entrecortada, se despidió de su hijo en su idioma y pidió justicia para su familia y su comunidad. También habló el hermano de Isacama, quien denunció las amenazas y la violencia que enfrentan los líderes indígenas en la Amazonía por defender sus derechos y territorios.
Los líderes de la Federación Nativa del Río Curanja y Afluentes (Fenacoka), de la cual Isacama era miembro y dirigente, destacaron las cualidades y el compromiso del líder indígena en la defensa de los bosques y los derechos indígenas en la Amazonía peruana. Asimismo, exigieron al Estado peruano una investigación exhaustiva y el castigo a los responsables del crimen, así como medidas efectivas para proteger sus vidas y territorios.
Mariano Isacama era un aliado importante en la lucha por la defensa de los derechos indígenas y la conservación de los bosques en la Amazonía peruana. Como líder de la Fenacoka, había denunciado en reiteradas ocasiones la tala ilegal, el narcotráfico y la invasión de sus tierras por parte de empresas madereras y mineras.
La presencia de líderes de otras comunidades indígenas, como los de Ucayali, Loreto y Huánuco, demuestra la unidad y la solidaridad de los pueblos amazónicos en la lucha por la defensa de sus territorios y recursos naturales. Durante el sepelio, los líderes indígenas denunciaron la falta de protección y la impunidad en los casos de violencia y amenazas contra los líderes indígenas en la Amazonía.
El asesinato de Mariano Isacama es un ejemplo más de la violencia y las amenazas que enfrentan los líderes indígenas en la Amazonía por defender sus tierras y recursos naturales.
La lucha por la defensa de los bosques y los pueblos indígenas en la Amazonía continúa, y la memoria de Mariano Isacama será un símbolo de resistencia y esperanza.